Buenas de nuevo a todos, antes que nada quisiera agradecer la cálida acogida que ha tenido tanto la idea de este blog como la del blog "Conoce a tu conocimiento." por parte de amigos y compañeros. No obstante, debido a ello tengo que darme ya un pequeño tirón de orejas por haber tardado en daros una siguiente entrada; pero aparte de algunos problemas de salud, durante estos días finales de septiembre y comienzos de octubre imaginaréis que han comenzando nuevas convocatorias de casi todo, cursos, ofertas de empleo etc, a las cuales he intentado aplicar de toda forma posible, de ahí mi ausencia.
Pero sobre estas últimas semanas ya os comentaré con más detalle, ya que la entrada de hoy, la cual tenía en mente desde hace tiempo, comenzará mirando al principio de todo: nuestra entrada en el sistema universitario.
Y es que creo que es bastante necesario, si nos planteamos ahora que hacer con nuestra vida una vez acabamos la carrera etc., mirar atrás y recordanos como entramos en ella y con que inquietudes, planes futuros y de como estos se han mantenido a lo largo del tiempo, o todo lo contrario, permitiéndonos ver que cosas aún podemos cambiar sobre como enfocamos nuestra situación actual.
Antes de entrar en la Universidad puedo resumir mi vida estudiantil en: me esfuerzo poco, porque lo que estudio me lo sé y me da pereza volverlo a leer. Y es que ya que veía que estudiando poco, sacaba buena nota porque me gustaba la asignatura (caso de ciencias naturales) o se me daba bien memorizar (historia), tengo que reconocer que nunca le veía especial importancia a la nota, y el hecho de estudiar me aburría de sobremanera; necesitaba leerlo y entender el tema para que me motivara, y para ello...pues tenía que gustarme el tema concretamente. Hubo más detalles que influyeron en mi rendimiento académico, pero eso no viene al caso.
No obstante, después de un gran esfuero que realizé en meses de verano antes de mi último año de Bachillerato, pude acabarlo bastante bien en 2005 y presentarme a selectividad en Junio. Me preparé selectividad repasando todo de nuevo, pero con poca gana ya que era volver a repasar lo mismo..y lo mismo..y lo mismo... (¿le suena a alguien esto?) además de ya encontrarme bastante quemado por el esfuerzo anterior.
Una vez saqué selectividad, llegó el primer dilema: "Bueno, ¿cual es el siguiente paso?", y aquí viene el primer pero; realmente...no me paré a pensar bien que quería trabajar en el futuro y desde aquí recomiendo a todos mis lectores tanto por si no han llegado a este punto, a por sus conocidos que traten de no entrar en una carrera "a ver que pasa"; sino que mediten bien y traten de buscar que les motiva, que les llenaría o al menos, informarse sobre las mismas. Es cierto que hay veces que al iniciar una, te acaba gustando/llenando lo suficiente como para vivir de ella, pero no siempre es el caso.
Y en cuanto mi caso, por un lado me atraía muchísimo la informática, el mundo de los videojuegos etc., pero pensaba que tendría graves dificultades al no tener formación del bachilelrato que le precede, tecnológico. Por otro lado, tenía mi amor por la naturaleza desde que era un retaco, así que barajé la posibilidad de biología, ya que vocacionalmente, la zoología, la botánica y la ecología me entusiasmaban.
Finalmente, entré en Ingeniería Informática Superior, la cual no es que fuera dura, era MUY dura y con una gran carga de matemáticas y física y unas nociones de informáticas a un nivel bastante abstracto. De aquí puedo decir que el sistema en aquel momento era bastante enrevesado, y que a pesar que en años posteriores mejoró (y mejoró más aún con la imposición del Grado), tenía miedo a pensar que le dedicaría año tras año, con el consecuente gasto de dinero y tiempo, cuando quizás a mi modo de entender/ver las cosas mentalmente hablando era el principal escollo para poder sacarla.
Y tras dar ese "mal paso", entré en Biología, la cual reservaremos para la siguiente entrada (y que vuestras neuronas puedan darse un respiro con tanto texto).
Un abrazo a todos!
